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2 de noviembre de 2009

Crítica: Millenium 2 - La Chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina El Regreso de Lisbeth

FICHA TÉCNICA

T. ORIGINAL: Flickan som lekte med elden (The Girl Who Played with Fire)
AÑO: 2009
NACIONALIDAD: Suecia
DIRECTOR: Daniel Alfredson
GUIÓN: Stieg Larsson
MUSICA: Jacob Groth
REPARTO: Noomi Rapace, Michael Nyqvist, Lena Endre, Georgi Staykov, Per Oscarsson, Sofia Ledarp, Hans Alfredson, Annika Hallin, Micke Spreitz, Paolo Roberto
PRODUCTORA: Yellow Bird Films / Nordisk Film / ZDF Enterprises / Sveriges Television
GENERO: Thriller. Intriga.
WEB OFICIAL: www.millennium2.es




ARGUMENTO



Lisbeth Salander es la mujer más buscada del país. Dos colaboradores de Millennium, a punto de sacar a la luz un escándalo sobre el comercio sexual en Suecia, han sido brutalmente asesinados y las huellas de Lisbeth están en el arma homicida, lo que añadido a su historial de comportamiento vengativo e impredecible, la convierten oficialmente en un peligro para la sociedad. Sin embargo, nadie puede encontrarla. Mientras, Mikael Blomkvist, editor jefe de Millennium, no cree lo que se dice en las noticias y sabiendo que Salander es feroz cuando se siente amenazada, está desesperado por encontrarla antes de que la acorralen...



TRAILER






CRÍTICA



Cuando intentamos disertar sobre una adaptación al lenguaje cinematográfico de una obra literaria, cualquiera que esta sea, a menudo se plantean las mismas cuestiones: si tal traslación es fiel al texto original y se incluye toda la información o los pasajes allí narrados , si la elección de los personajes y los entornos es la adecuada, etc., incluso a veces cayendo en el purismo y en el integrismo filológico más recalcitrante…

Voy a dejar todo este tipo de consideraciones aparte por una sencilla razón: aunque soy lector frecuente y en su momento adquirí dos de los voluminosos volúmenes de la susodicha trilogía (decidí posponer la compra del tercero hasta finiquitar aquel par) aún no he tenido el placer de haber leído ni una sola línea de la prosa de Larson, así que no sería menester hacer apreciaciones en tal sentido.




Comencemos con el argumento del film: la historia comienza tal y como la dejamos en la anterior entrega, con Lisbeth desaparecida tras estar viajando por medio mundo y haber establecido su residencia en una localización caribeña. Roto cualquier contacto con Mikael Blomkvist, decide retornar a Estocolmo para saldar cuentas con su detestable tutor de la condicional y reencontrarse con una antigua relación, su amiga Mimi. Mikael, por otro lado, sigue su exitosa carrera profesional con Millenium, al que se incorpora un joven periodista con un importante reportaje sobre una oscura red de prostitución que implicará a relevantes nombres de la sociedad sueca.

Dag Svensson, el joven reportero, junto con su novia Mia, repentinamente son encontrados muertos en su apartamento por Blomkvist, y poco después el tutor de su antigua amiga Salander es localizado en parecidas circunstancias. Todo apunta a que Lisbeth puede ser la autora de los crímenes, hecho que Mikael niega hasta la saciedad y que le hace ponerse a investigar el suceso para exonerar a su amiga del trance; mientras, Lisbeth desde su escondite decide también localizar a quienes están tratando de implicarle en tales asesinatos, investigación que le llevará a recordar oscuros sucesos de su pasado, un pasado de pesadilla y un sueño recurrente: ella intentando acabar con la vida de su padre arrojándole gasolina y prendiéndole fuego con una cerilla…



En una trama que aúna acción, drama, intriga y mucho thriller, el realizador Alfredson (sí, seguro que el apellido os suena familiar, ya que su buen hermano fue el encargado de dirigir esa maravilla que es Déjame Entrar) condensa un capítulo que sirve de transición entre la presentación de su personaje clave, Lisbeth Salander, digna heredera en carácter a todos esos roles femeninos fuertes, resueltos e independientes (habría que ver a Maureen O'Hara y Katharine Hepburn en su tesitura), y el final que se prevee (y así se anuncia) espectacular desenlace de la saga. Y es que Noomi Rapace, Lisbeth ya para los amigos, es Millenium, es la piedra bascular donde se sustenta la trama, una heroína resuelta, impasible, guerrera, independiente, dura, traumatizada por su pasado pero no bloqueada por el mismo, leal pero no afectuosa y siempre pragmática y natural y explícita en sus relaciones (también sexualmente hablando, sexualidad que en todo el transcurso de la historia se muestra descarnada y visceralmente realista).

La trama funciona sin problemas cuando ahondamos en el oscuro pasado de Lisbeth, de sus motivaciones, de los sufrimientos que la han marcado en el devenir de su existencia, pero flojea en cuanto entramos en el terreno del thriller más convencional, dejando a un lado la profundización en los personajes para centrarse en la acción en si, acción en partes demasiado dilatada (la incursión nocturna final de nuestra tatuada guerrera en el escondite de la granja se ve ralentizada en exceso por largos planos vacios en exceso, quizás la hieráticamente pausada mirada sueca sea responsable de ello), pero que en términos generales es correcta sin llegar a aburrir en ningún momento. Por útimo destacar las luces en toda la historia, un estupendo trabajo de iluminación por parte del responsable de fotografía Peter Mokrosinski.

En resumidas cuentas, un correcto thriller, acicate para finiquitar una más que interesante saga. Pero para eso habrá que esperar. Mientras soñaremos con muchachas con dragones tatuados en la espalda...
Pedro García

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